En Nación Andaluza sabemos de la importancia de la lengua en la transmisión del conocimiento, historia, valores sociales, como forma de resistencia ante la colonización cultural y nexo con nuestro pasado como formación social que tratan de ocultarnos. La lengua andaluza es una manifestación más del hecho nacional andaluz y de nuestra opresión como pueblo trabajador. Su marginación y desprestigio social en los medios académicos y periodísticos supone un mecanismo de manipulación cultural para justificar el empobrecimiento secular y la actual dependencia política de Andalucía.
A pesar de la represión lingüística, la asimilación al idioma del conquistador nunca ha llegado a completarse por la persistencia en el Pueblo Trabajador Andaluz de formas lingüísticas muy diferentes del castellano que tratan de imponernos. Nos robaron los idiomas que hablábamos, pero hemos vuelto a desarrollar unas formas de comunicación donde la influencia de nuestro pasado es más que evidente ejerciendo una resistencia cultural inconsciente y colectiva al exterminio civilizatorio que nos imponían.
El andalucismo revolucionario de Blas Infante también participaba de esta visión de la lengua andaluza. Normalizar y difundir nuestra lengua es una de las tareas que se impone la izquierda independentista andaluza en el camino por recuperar nuestra soberanía perdida.
¡Por la normalización lingüística de Andalucía!
XVI Asamblea Nacional de Nación Andaluza.
Córdoba, 3 de marzo de 2024.
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